martes, 10 de diciembre de 2013

LA MAGOSTA, OTROS CURSOS



       Cabalgaba
        El conde Olinos 
      Por un bosque de castaños

cabalgaba el conde Olinos
por un bosque de castaños.
Va a dar agua a su caballo
A la orillita del rio.

Mientras el caballo bebe
Él canta dulce cantar.
Todas las aves del cielo
Se paraban a escuchar.

Caminante que camina
Olvida su caminar,
Navegante que navega
La nave vuelve hacia allá      


Desde las torres más altas
La reina le oyó cantar:
-mira hija cómo canta
La sirenita del río.

-No es la sirenita, madre,
La de tan bello cantar,
Sino que es el conde Olinos
Que por mí penando está.

-Si por tus amores pena
Yo le mandaré matar,
Que para casar contigo
Le falta sangre real.

No le mande matar, madre,
No le mande usted matar;
Que si mata al conde Olinos
A mí la muerte me da.



Guardias mandaba la reina
Al conde Olinos buscar,
Que lo maten a lanzadas
Y arrojen su cuerpo al río.

La infanta con grande pena,
No cesaba de llorar.
Él murió a media noche
Y ella a los gallos cantar.

A ella, como hija de reyes,
La entierran junto al altar,
Y a él como hijo de condes
 unos pasos más atrás.

De ella nace un rosal blanco;
De él un espino albar.
Crece el uno crece el otro,
Los dos se van a juntar.



La reina, llena de envidia,
A ambos los mandó cortar.
El hombre que los cortaba
 no cesaba de llorar

Del rosal nació una garza;
Del espino, un gavilán,
Juntos vuelan por el cielo,
Juntos vuelan par a par.

Lara Marín 

Texto aportado por Isabel Marín